Un galardón para la crónica social

Hace ya muchos años que la crónica social dejó de encajarse en una práctica fría y simple para convertirse en una apreciable fuente de información que permite evaluar el desarrollo económico del país. Sin duda, esta importante área del periodismo incluye el valor humano mucho más allá de la belleza, la moda y la suntuosidad de los eventos, reflejando la esencia de sus protagonistas. En toda esta evolución, para mi orgullo como editora, las páginas de Listín Diario han sido pioneras en otorgarle a la crónica social la relevancia que merece, desde que en 1996 la veterana periodista Carmenchu Brusíloff se convirtió en la primera responsable de la sección Las Sociales de este medio informativo, y reforzó la importancia de las recepciones.

La gala

Si bien es cierto que quien ama y le apasiona lo que hace cada día no piensa más que en su satisfacción personal, también es real que todo premio es un reconocimiento, y recibirlo demuestra públicamente algunos méritos profesionales que de otra forma quizá quedarían en el anonimato. Por suerte para quienes ejercemos el periodismo social, gracias al trabajo de un equipo comprometido e innovador, desde hace cinco años la Asociación Dominicana de Cronistas Sociales organiza el Premio Nacional a la Crónica Social. Hace unos días, bajo la coordinación de la actual directiva que dirige Rosa Arredondo, fue realizada una emotiva ceremonia que impregnó de elegancia la sala Máximo Avilés Blonda del Palacio de Bellas Artes y que demostró que el gremio está viviendo una nueva etapa de desarrollo profesional.

La noche de las cronistas

Un jurado calificador tuvo la responsabilidad de evaluar 51 trabajos periodísticos, de 17 postulantes, y con el lema ‘amor, fiesta y paz’ se realizó la ceremonia en la cual las periodistas María Isabel Matos, María Mercedes y Marta Quéliz, fueron galardonadas en las categorías Entrevista, Crónica y Reportaje. La noche también fue testigo del reconocimiento otorgado a Susana Veras, de Santiago, con el ‘Gran Premio a la Trayectoria’ y a María Elena Núñez, con el ‘Premio Pionero de la Crónica Social’.

La cantidad de trabajos presentados, la variedad de los formatos y el entusiasmo de los participantes dejó claro que la crónica social dominicana no detendrá sus pasos. El camino a la excelencia ha sido trillado por una generación que aún sigue presente y que se ha mostrado dispuesta a compartir su experiencia con los noveles talentos.

 Reconocimiento a los organizadores

Cuando has tenido la oportunidad de sentarte del otro lado del certamen y formar parte del equipo organizador, sabes el significado de cada día de estrés, de los miles de detalles que debes tomar en cuenta, de las largas horas que pasas planificando cada paso, de lo vital que es el tiempo que inviertes en perfeccionar las ideas. Ser artífice de un proyecto de este tipo significa tener capacidad de liderazgo, sensibilidad, responsabilidad, enfoque a resultados y empatía para trabajar en equipo, así que tanto dar como recibir galardones es, de entrada, positivo para cualquier gremio. Organizar un evento, por mucho que te guste el oficio, es una tarea agotadora. Conocedora de todo lo que implica, desde aquí mi reconocimiento para Rosa Arredondo y la actual directiva de la ADCS, que aunque deben estar conscientes de que siempre habrá una oportunidad de mejora, es justo estar satisfechos con todo lo logrado.