Una inolvidable conversación con Carmen Heredia
Hay que ser bien osado para sentarse a conversar sobre música, teatro y pintura con Carmen Heredia, conocida como ‘la dama de la cultura’. ¡Pero lo hice! Y aquel encuentro que pensé que sería una entrevista de rutina, se convirtió en una hermosa experiencia que ha despertado en mí el interés por la ópera.
De gestos suaves, conversación pausada y mirada fija, doña Carmen evoca espiritualidad y paz, como una buena maestra.
Basta con traer a la mesa el tema para que sus ojos irradien pasión: “Puccini es mi compositor preferido, sus óperas: Tosca, Turandot, Madame Butterfly, La Boheme, simpre que las escucho me producen una nueva emoción. También me apasionan de Verdi, La Traviata, Rigoletto, Aida, Nabucco y El Trovador. El brindis, El va pensiero, Nessun dorma, Che gélida manina, son arias entrañables. De Richard Wagner, mi preferida es “La Walquiria”, su famosa “Cabalgata”, es un momento para mí, espectacular”.
A ella, su reciente designación no le es ajena, ya ha desempeñado en décadas pasadas cargos públicos como directora de Bellas Artes y del Teatro Nacional Eduardo Brito.
La cultura y todos sus contextos forman parte de su ADN. “Vengo de un hogar donde se escuchaba la música clásica; mi padre y mi abuelo Mariano eran amantes de la ópera, de hecho, escogieron para mí el nombre de dos óperas: Carmen y Alceste. Mi madre era profesora de piano”.
Inició sus estudios artísticos a los nueve años en la Academia de Ballet de la profesora Magda Corbett y en la Escuela Elemental de música, con tres años de violín. Estudió teatro con el profesor Máximo Avilés Blonda. Más tarde en New York recibió entrenamiento en la Nora Kovach Academy of Ballet, en danza clásica y moderna. Es graduada en Administración de Empresas. En España realizó curso sobre Producción y Gestión de Espectáculos en el Instituto de Artes Escénicas y Música de Madrid.
Así que no queda duda que ha llegado a la posición correcta. Se define como una mujer “perseverante, resiliente e incansable, pero ante todo solidaridad. Valoro la amistad sincera. Mi mayor orgullo es mi familia, la que formé junto a mi esposo ya fallecido, Bosco Guerrero”.
Es autora de libros que enaltecen las bondades de la cultura: Espacios de Teatro y Danza y Otros Espacios y Desde Platea, que recogen las críticas que durante muchos años escribió en distintos medios. “Estoy trabajando en mi próximo libro ‘Personajes y calles de mi vieja ciudad’, artículos ampliados que escribí en Areito, del periódico Hoy, y espero ponerlo en circulación próximamente”.
Pionera
Heredia es la primera mujer en ser Ministra de Cultura, y no esconde su entusiasmo.
“Cuando fui designada por el presidente Luis Abinader me sentí emocionada y especialmente comprometida. Espero poder realizar la tarea encomendada, y que las circunstancias lo permitan, no obstante, trabajaremos con pasión y tesón”.
Ella quiere fomentar aún más la música clásica en el país, en comunidades de bajos recursos. “Llevar las orquestas a los diferentes sectores, y al interior del país, es una forma; incentivar a los jóvenes a asistir a los conciertos, ofreciéndoles tarifas asequibles y así, ir logrando un nuevo público tan necesario. Es también esencial dar apoyo a las agrupaciones musicales y a las Escuelas de Música”.
“El hombre a través de la historia ha sabido sortear las inclemencias de la naturaleza, las guerras, las epidemias, y ha salido airoso, y los artistas especialmente, a través de sus creaciones e iniciativas. La clase artística dominicana como la de todo el mundo, ha sido duramente golpeada, pienso que con el esfuerzo de los artistas y el soporte que pueda ofrecerle el Estado, podrá salir adelante, nunca es más oscura la noche, que cuando va a amanecer”.
Carmen Heredia.